Si quienes consideran la Cultura como un lujo prescindible levantaran el vuelo, viviríamos a oscuras; ello es una terrería intolerable. Sólo hay dos certezas: hemos nacido y habremos de morir; entre esas fechas cabe una vida que algunos queremos dedicar a ser más, pese a que ello suele llevar cosido el tener menos. Germinar y crecer es mi derecho.